La nueva característica de la aplicación toma la ubicación de la persona y, basándose en el historial del usuario, también puede predecir el lugar de destino. Por ejemplo, Maps puede estimar hacía dónde se dirigirá el conductor un sábado, sin que la persona siquiera elija el destino.
Además, utilizando alguna de las características de Waze (compañía que compró Google por mil millones de dólares en 2013), Maps tiene información en tiempo real sobre el tráfico.
Otra de las características es que puede guardar información sobre patrones de tráfico en las vías. Así puede conjeturar cómo será el tráfico a una hora específica.
¿Pero cómo obtiene Google toda esta información? Cada persona que tenga un teléfono Android o un iPhone con la aplicación de Google Maps abierta y con el servicio de ubicación activado, le estará enviando de forma anónima información en tiempo real a Google.
Maps utiliza esta información, entre otras cosas, para calcular cuántos vehículos hay en la vía y cuán rápido se moviliza. Así que entre más personas utilizan la aplicación, mejor serán los datos que se tenga sobre el tráfico.
No obstante, si la persona no se siente cómoda con que Google le monitoree cada paso, puede optar por desactivar su ubicación. Por otro lado, si todos optaran por desactivar la opción la información del tráfico no sería precisa. (Tomado de Infobae)