La empresa española ‘Mi Último Capricho’ es la encargada de hacer los diseños personalizados para sus clientes. Su fundador, Jesús Manzanaro Díaz, le garantiza que no encontrará dos ataúdes iguales.
Para la compañía lo más importante es ofrecer piezas únicas en diseño, tamaño y gusto de sus clientes. La idea es innovar y permitir llevar la pasión de los hinchas un poco más allá.
Si usted quiere cumplir su última voluntad, le recomendamos que empiece a ahorrar. El ataúd que desea puede costar 15.000 euros, unos ¢8 640.000.
Eso sí puede escoger el estadio que quiera, el nombre de su jugador favorito y los cambios personalizados que desee. Los cajones se hacen de forma artesanal, los diseños de la madera son tallados a mano y se cumple el capricho que quiera, solo tiene que decirlo. Veamos algunos. (SOHO)