Yossie Adler, su esposa Jennie y su pequeña hija de 19 meses estaban listos para irse a casa, luego de vacacionar en Miami.
De pronto, la familia fue abordada por personal del avión, quienes le pidieron dejar sus asientos y los acompañaran a sus oficinas, en el aeropuerto de Miami. Su sorpresa fue mayor cuando les dijeron el porqué: ¡su olor!
La familia asegura que tomará acciones legales contra la aerolínea American Airlines, pues a parte del mal rato que les hicieron pasar, quisieron comprar su silencio con comida y hospedaje en un hotel cercano al lugar. (TVNotas)