Pero lo peor es cuando estas empresas intentan callar a los que quieren mostrar la verdad sobre el problema de esos productos para la humanidad; por ejemplo, entre 2011 y 2015, Coca-Cola y Pepsi se gastaron cuantiosas sumas de dinero en patrocinar a más de 96 organizaciones científicas y médicas.
Está muy bien si no fuera por un detalle. El objetivo no era precisamente promover la ciencia, sino silenciar posibles estudios que ventilaran la relación entre el exceso de azúcar y enfermedades como la diabetes o la obesidad.
Y es que un nuevo estudio publicado por científicos de la Universidad de Boston reveló que la inversión en patrocinios de Coca-cola y Pepsi no solo ha sido amplia, sino que prácticamente siempre ha estado orientada a minimizar el impacto de estudios que les perjudicaban.
Hace unos días se descubrió que Coca-Cola había pagado a la Universidad de Harvard para eximir el azúcar de la incidencia de las enfermedades cardiovasculares y acusar solo al consumo de grasas saturadas.
La Organización Mundial de la Salud recomienda que solo entre un 5 y un 10% de las calorías que ingerimos al día provengan directamente del azúcar. En un adulto sano, eso son unos 25 gramos de azúcar al día. Una lata de Coca-Cola aporta 39 gramos, o sea, es un tanate de azúcar. Para bajar el consumo les recomiendo raicilla, caña fístula, jocote verde y 1 litro de baba de caracol arrastrado por una cabeza de agua. (Fuente Gizmodo)