Grigore notó que las personas de su comunidad, en la ciudad de Cluj, no estaban siguiendo las medidas de seguridad en medio de la pandemia. Como su tienda depende en gran medida de pedidos personalizados, pues trabaja para teatros y compañías de baile, ya tenía el modelo, pues lo había usado para uno de estos proyectos: unos zapatos de gran tamaño que puedan ayudar a la gente a seguir las medidas de seguridad al pie de la letra.
“Se puede ver en la calle, la gente no respeta las reglas de distanciamiento social”, dijo Lup a un medio de comunicación. “Fui al mercado a comprar plantas para mi jardín. No había mucha gente allí, pero se acercaban cada vez más”.
Fue ahí cuando se le ocurrió esta curiosa idea: “Si dos personas que usaran estos zapatos se encontraran frente a frente, habría casi un metro y medio de distancia entre ellas. Reducir el distanciamiento a un metro duplica el riesgo de infección”. Los zapatos en cuestión, adaptados de un modelo anterior que Lup ha hecho para actores, son de un tamaño europeo de 75 y requieren casi un metro cuadrado de cuero. Desde su creación, Lup ha recibido cinco pedidos de los zapatos que cuestan 115 dólares y le toma dos días realizarlos. (Guía del Varón)
