Se trata de Holywins, una iniciativa que llega a España de la mano del obispado de Cádiz y Ceuta que llama a los chiquitillos a disfrazarse de santos en lugar de ir vestidos con accesorios que recuerden a los muertos vivientes.
Efectivamente con esta propuesta, los niños, además de disfrazarse, aprenden la historia de los santos y celebran esta festividad de una manera alegre.
Holywins nació en París en el año 2002 y cada año el 31 de octubre acuden miles de niños y jóvenes. Los disfraces que más éxito tienen entre los más pequeños son: angelitos, Teresa de Calcuta, San José y la Virgen María o San Francisco de Asís. (Fuente libertaddigital.com)