El reclamo tiene a varias solicitudes: aumento en los salarios, la negativa a más impuestos, derechos laborales, defensa de los derechos de la Policía Penitenciaria y defensa de las convenciones colectivas.
Ante estas manifestaciones, el presidente Luis Guillermo Solís solicitó a los huelguistas no causar actos violentos y no afectar las citas a pacientes, así como las lecciones a los estudiantes.
También mantiene su posición de que esta huelga no tiene ninguna justificación, pues considera que existen espacios para el diálogo social y afirma que el Gobierno ha estado anuente a atender los reclamos de manera oportuna, precisa y expedita.
“¿Qué duda cabe que este gobierno está preocupado por los más pobres? ¿Por qué se quiere generar dudas sobre el compromiso de esta administración con el cambio progresivo y la justicia social?”, así respondió Luis Guillermo Solís a los manifestantes.