Sin embargo, todos se sorprendieron cuando conocieron el anhelo de una viejecita de 104 años, quien dijo: “tengo 104 años y nunca he quebrantado la ley”.
El deseo de Anne Brokenbrow, de 104 años, era, nada más y nada menos, ser arrestada por la policía. Por eso, con la ayuda de elementos oficiales, lo hicieron realidad, así que la llevaron en custodia bajo el cargo de “ser una ciudadana honrada”.
Hablando sobre su experiencia con la ley, Anne dijo:
“Tuve un hermoso día, fue interesante. Nunca antes me había pasado algo así. Me pusieron las esposas, yo tenía todo. La policía fue muy amable en todo momento”
El cumplimiento de deseos fue parte de un plan diseñado para invitar a los ciudadanos a ayudar a los ancianos. (Guía del Varón)