Esto se traduce en que usted, usted, usted ganará ¢760 por cada ¢100 mil que reciba de salario.
Alfredo Hasbum, ministro de Trabajo, dijo que este aumento está basado en el costo de vida, que corresponde a la inflación del segundo semestre de 2016.
“Comentamos la propuesta, en su mayoría no hubo comentarios favorables, pero insistimos a las condiciones fiscales y no podemos ir más allá del reconocimiento de la inflación”.
Ante este ajuste del salario, la Asociación de Profesores de Segunda Enseñanza (APSE), lanzó el grito al cielo y criticó el poco aumento; así lo hizo saber Ricardo Molina, presidente de la asociación: “No nos parece este aumento, parece que la fórmula no sirve, este aumento no es correcto y parece no les interesa”, sostuvo.
Apenas aparezca en La Gaceta, lo cual podría ser para finales de este mes, el aumento se hará efectivo y se aplicará de forma retroactiva.